El Gobierno colombiano amplió hoy en 31.000 hectáreas el área protegida del Páramo de Santurbán del que descienden las fuentes de agua potable para más de dos millones de personas del oriente del país.
La ministra de Medio Ambiente, Luz Helena Sarmiento, dijo a periodistas que el Gobierno “amplió hoy de 11.000 a 42.000 hectáreas el área protegida del Parque Natural Regional Santurbán, en el departamento de Santander”.
La decisión supone el fin de una disputa entre ambientalistas, mineros y campesinos con el Gobierno que ve en esta acción una oportunidad para construir un Plan de Desarrollo Rural Integral con enfoque territorial dando prioridad a la protección del ecosistema y las fuentes hídricas.
El Páramo de Santurbán, que está a una altura de entre 2.800 y 4.290 metros sobre el nivel del mar, se sitúa entre los departamentos de Santander y Norte de Santander, este último fronterizo con Venezuela.
En el páramo nacen numerosas lagunas y riachuelos que abastecen de agua a las ciudades de Bucaramanga y Cúcuta, respectivas capitales regionales, así como a otros municipios de la zona.
La ministra señaló que “el principal acuerdo es que no habrá desplazamiento de gente” y que lo que el Gobierno busca “es darle mayor seguridad jurídica en la tenencia de la tierra”.
Planes de reconversión
Sarmiento explicó que el Ministerio de Agricultura buscará con los alcaldes de la zona y los actores rurales el desarrollo de proyectos de reconversión productiva, vivienda rural y mejoramiento de la calidad de vida de los habitantes de la zona del Páramo.
La funcionaria anunció planes de reconversión para los campesinos de la región dedicados a la agricultura y minería.
“Ahora el campesino cuidará el páramo y a la vez mejorará sus ingresos”, señaló la ministra.
Según el Ministerio, varios proyectos mineros que se iban a desarrollar en el Páramo se verán afectados, entre ellos el de Eco Oro, de capital canadiense.
Precisó que en la zona fueron otorgados 28 títulos mineros de los cuales diez se verán afectados en diferente grado por la nueva delimitación del Santurbán.
Los mineros artesanales que tengan títulos y licencias vigentes podrán desarrollar sus actividades siempre observando altos estándares para no afectar el medio ambiente porque los ecosistemas de páramo son verdaderas “fábricas de agua” que albergan biodiversidad única y contribuyen a mitigar el cambio climático
El Gobierno también organizará mesas de trabajo con unas 10.000 familias de la zona que se dedican a sembrar cebolla y que ahora tendrán que cambiar de actividad para lo cual se les dará apoyo.
Fuente: Agencia EFE
