Esta especie de nombre científico Rana catesbeiana, que a pesar de ser de Estados Unidos fue introducida desde Brasil a nuestro territorio, hoy se encuentra de manera fácil hasta en Bogotá e incluso en los predios de la Universidad Nacional.

Según el estudio del biólogo José Vicente Rueda, esta rana, de cabeza ancha y cuyo peso puede alcanzar una libra, es reproducida en criaderos en Brasil, y de manera irresponsable fue traída a Colombia.

Se caracteriza por su apetito voraz y su capacidad de engullir desde insectos, lombrices y serpientes hasta pájaros. Incluso puede depredar a otros anfibios.

Tan solo seis años después de su introducción (2008) se comenzaron a detectar poblaciones densas y consolidadas de esta especie en los valles del Magdalena y Cauca.

En el estudio de la U.N. se analizaron los contenidos estomacales de 60 ranas y se encontró que predan cualquier tipo de organismo que esté a su alcance y quepa en su gran boca.

Hay que tener en cuenta que dicho animal tiene la capacidad de poner hasta 20.000 huevos. Los renacuajos, según las condiciones climáticas, pueden saltarse el proceso de metamorfosis para pasar a adultos. Hoy se calcula que pueden encontrarse en todo el territorio nacional.

La Rana catesbeiana causa desequilibrio en el ecosistema, pues entró a competir por espacio y alimento con las especies nativas, y mientras estas limitan sus tasas de reproducción a las condiciones de su medio, la rana toro explota las suyas al máximo para colonizar. Así, a pesar de que en Colombia hay más de 600 especies de ranas nativas, muchas de ellas están desapareciendo a causa de la invasora.

El tema de las especies introducidas que se convierten en amenaza de la biodiversidad de un país será tratado en el próximo Congreso Colombiano de Zoología, que se realizará en Cartagena.

Durante esta IV versión se hablará de otros animales como el pez león o el caracol gigante, que de manera silenciosa atacan a otros grupos y además de reproducirse muy rápido invaden nichos de otras especies nativas que están descuidadas y se extinguen fácilmente.

Dentro de los grupos más amenazados en el país están los anfibios, de los cuales se calcula la existencia de 900 especies con el nivel más alto de endemismo, es decir, que solo existen en un sitio. “Aquí hay anfibios que viven o vivieron en un pequeño sitio no mayor a un kilómetro cuadrado y eso los hace más vulnerables”, comenta José Vicente Rodríguez, presidente de la Asociación Colombiana de Zoología.

Otro efecto que ha influido es la sinergia entre cambio climático, que ha posibilitado por ejemplo que ciertos patógenos que no eran dañinos para los anfibios en un momento dado se tornaron agresivos y extinguieron muchas especies.

En cuanto a animales vertebrados, excepto peces, hay casi 250 especies incluidas en las categorías más altas. Se tienen 17 libros rojos publicados (especies en peligro de extinción).

La U.N. ha sido un líder en la investigación de animales en riesgo de desaparecer. En la actualidad, hay cerca de 600 especies que pueden correr la misma suerte.

Por eso, el lema para este año es “la biodiversidad sensible, un patrimonio natural irremplazable”. Se quiere resaltar ese grupo de especies migratorias y endémicas del país que forman ese patrimonio y que de alguna manera con el ejercicio académico de la autoridad ambiental ha venido siendo analizado para mirar cuál de ellas están en riesgo, puntualizó el profesor Rodríguez.

Se expondrán experiencias de cómo ha sido el manejo de las especies en las Islas Galápagos, uno de los iconos del mundo que ha sufrido mucho la pérdida de biodiversidad de plantas y animales.

En esta oportunidad, el congreso ha tenido una acogida nacional e internacional sin precedentes, se compartirá escenario con eventos como el X Congreso Latinoamericano de Herpetología y el X Congreso de la Sociedad Latinoamericana de Especialistas en Mamíferos Acuáticos.

La convocatoria ha reunido hasta el momento a más de 3.500 estudiantes y profesionales, que presentarán 2.650 trabajos distribuidos en 55 simposios y 10 líneas temáticas.

De las 300 instituciones que asisten con trabajos, la Universidad Nacional es líder con la presentación de 260 investigaciones de profesores y estudiantes.

El congreso nació en la U.N. en el año 2.000, cuando el Instituto de Ciencias Naturales de la Facultad de Ciencias organizó la primera versión. El segundo congreso se hizo en Santa Marta, donde nació la Asociación Colombiana de Zoología que hoy cuenta  con 1.700 miembros. El tercer evento se celebró en Medellín.

La cuarta versión se celebrará este año en Cartagena entre el 1 al 5 de diciembre.

Fuente: Agencia de noticias Universidad Nacional