Tres personas han muerto en Italia a consecuencia de los fuertes vientos y las lluvias que afectaron varias regiones del país, con daños materiales y consecuencias en las comunicaciones terrestres, marítimas y aéreas.

Los fallecidos fueron un hombre que murió cerca de Lucca, en Toscana (centro) cuando el vehículo que conducía fue alcanzado por una roca desprendida por efecto del viento, que también causó la muerte de una mujer en Urbino (centro) tras ser golpeada por un árbol derribado por las fuertes ráfagas.

Otro hombre murió cerca de Milán (norte) cuando el viento provocó que perdiera el control de la bicicleta en la que se trasladaba y chocara contra un vehículo.

(centro) a un avión de carga que, procedente de Sarajevo (Bosnia-Herzegovina) intentaba tomar tierra en ese aeródromo, posteriormente cerrado temporalmente al tráfico.

El aeropuerto de Florencia, la capital de Toscana, una de las regiones más afectadas por el temporal, tuvo que suspender vuelos y retrasar algunas de sus operaciones y se registraron derrumbes y caídas del árboles en varias zonas del país.

En Cortona, al sur de Florencia, el viento también fue la causa de que el campanario de una iglesia del siglo XVI colapsara, sin causar daños personales.

En la provincia de Nápoles (sur) se multiplicaron las intervenciones de los servicios de emergencia por inundaciones mientras en la cumbre del volcán Vesuvio se registraron precipitaciones de nieve.

También resultaron afectadas las comunicaciones entre las dos mayores islas de Italia, Cerdeña y Sicilia, con suspensión de varias líneas de ferris y de conexiones aéreas con el continente.

Las previsiones meteorológicas para el viernes mantienen la presencia de fuertes vientos en la zona central del país, con lluvias que se extienden hacia el sur, pero en las regiones del norte se esperan cielos despejados aunque con temperaturas a la baja.

Fuente: Agencia EFE